Lo que dejó la décima fecha del Apertura

En una fecha en la que se destacó el valioso triunfo de Boca en el clásico, San Lorenzo consiguió su sexta victoria consecutiva y mira a todos desde arriba, muy arriba. Ya son cinco los puntos que lo separan de Tigre, su único escolta, cuando quedan nueve fechas para el final. Además, Independiente volvió a ganar en el regreso de Pepé Santoro, y Racing, que venía en ascenso, retrocedió un paso. El Ciclón tuvo que trabajar mucho para sacarse de encima a un solidario San Martín de Tucumán. El Cuqui Silvera apareció en el momento justo y los de Russo sueñan con el campeonato. Tienen motivos para ilusionarse: un técnico capaz como Russo (que puede llegar a la Selección), una defensa firme (la que menos goles recibió en el Apertura), volantes que marcan y juegan, y delanteros picantes y oportunos. En el Monumental, el cabezazo de Viatri puso un poco de paz en Boca después de una semana complicada. El equipo de Ischia supo aguantar gran parte del segundo tiempo con diez por expulsión de Ibarra y luego del gol todo fue de Riquelme, amo y señor del Superclásico. River fue la contracara. El último campeón del fútbol argentino estuvo tibio, no tuvo línea de juego y sus hinchas se fueron enojados con el equipo. Espectacular lo de Tigre, que está a cinco de San Lorenzo y el sábado despachó a Lanús (3-0) en Victoria de la mano del sorprendente Morel (8 goles en el torneo). Bien por Independiente: ganó de visitante después de mucho tiempo con dos de Núñez y un gran trabajo de Montenegro en el regreso de Santoro, que agarró un fierro caliente pero no le tembló el pulso. La figura: Juan Román Riquelme, la figura del Superclásico. Entendió cómo jugar el partido. Además de enviar el centro que terminó en gol de Viatri, el enganche de Boca tuvo un buen segundo tiempo. Manejó los hilos del partido, estuvo cerca de meter un córner olímpico y demostró que se siente cómodo jugando contra River: perdió apenas 2 de 14 clásicos.. El golazo: Juan Sebastián Verón, de Estudiantes a Gimnasia de Jujuy. La Bruja recibió sobre la izquierda y sacó un zapatazo que, tras pegar en el travesaño se metió en el arco de Pezzutti. Ese remate sirvió, además, para abrir un partido muy cerrado que el Pincha ganó con sufrimiento. El arquero: : Marcos Gutiérrez, de San Martín de Tucumán. En el partido contra San Lorenzo tuvo atajadas notables. 'La mejor? Le sacó un remate fuerte a Bergessio que se metía abajo y en el rebote, en gran reacción, volvió a ganar. También le tapó el segundo al Cuqui Silvera. El error: José Luis Martínez Gullota tuvo responsabilidad en el gol de Barrales, que significó el triunfo de Banfield. El cabezazo del delantero fue al lugar donde estaba ubicado el arquero de Racing. Pero Wally se agachó, no pudo contener la pelota y se le metió entre las piernas. Lo mejor: el primer tiempo que regalaron Arsenal y Vélez en Sarandí. Los de Tocalli, en una ráfaga, se pusieron 3-0 con goles de Martínez, Cristaldo y Zapata. Parecía partido liquidado. Pero en el final de esa etapa descontaron Matellán y Papu Gómez para cerrar un emotivo 2-3 en cuarenta y cinco minutos. En el complemento, el local llegó al empate. Lo peor: hubo dos heridos de bala en un enfrentamiento entre hinchas de Boca en Núñez. El choque se produjo porque uno de los bandos le exigió entradas a uno que sí tenía. El Superclásico dejó un saldo de 15 heridos. El árbitro: Impecable trabajo de Héctor Baldassi en River-Boca. Manejó el clásico con mucha autoridad y no le tembló el pulso cuando tuvo que expulsar a Ibarra por exceso verbal. Le dio agilidad a un partido chato y no se dejó llevar por las constantes protestas de los jugadores. La polémica: Pablo Lunati, de floja actuación, no se atrevió a cobrar un penal a Silvera en la sexta victoria al hilo de San Lorenzo. Insólitamente retrotrajo la jugada afuera del área. Lo curioso:Poroto Cubero iba a ser titular en Vélez el sábado por la noche. Pero por la tarde el volante recibió un llamadito y abandonó la concentración con permiso del técnico Tocalli. 'El motivo? Su mujer, Nicole, estaba en el quirófano lista para dar a luz. El final de la historia feliz se llama Indiana y pesó 2,900 kg. La frase: "A veces no se tiene que buscar rendimiento sino resultados. A veces jugás bien y perdés", explicó Pepé Santoro, en su nueva vuelta a Independiente, que superó 2-1 a Colón en Santa Fe.
Fuente:Diario Clarin